Soroche y Mal de Altura en Cusco
También conocido como mal agudo de
altura, es básicamente consecuencia de la
falta de oxígeno. Ocurre habitualmente en
personas no aclimatadas que ascienden por
encima de los 2,000 msnm. en menos de 1 ó
2 días. El turista que llega al Cusco en
avión es el más propenso a sufrir soroche.
Los síntomas suelen ocurrir dentro de las
primeras 48 horas del ascenso (aunque
también mucho después) e incluyen desde
dolor de cabeza, náuseas, vómitos, falta
de apetito, sensación de ahogo,
alteraciones del sueño, vértigo,
palpitaciones y problemas de concentración
hasta edema agudo de pulmón.
Suele aparecer a partir de las 6 o 10 h
de exposición a la hipoxia y es más frecuente
en menores de cincuenta años y en sujetos que
residen habitualmente a menos de 900 m de altitud.
En cuanto a la hipoxia, un error muy común
es pensar que la cantidad o concentración de
oxígeno atmosférico disminuye con la altitud.
En realidad la concentración de oxígeno
siempre es la misma (21% aprox.)
independientemente de la altitud alcanzada,
lo que disminuye es la denominada presión
parcial de oxígeno y, con ello, la biodisponibilidad
del mismo. Aunque se sabe que la hipoxia es
la causante del Mal de Altura, el mecanismo
exacto por el que ésta lo provoca todavía
es desconocido.
Síntomas del Mal de Altura
· Cefalea (dolor de cabeza).
· Náuseas y vómitos.
· Anorexia (falta de apetito).
· Agotamiento físico.
· Trastornos del sueño.
Que pueden ser bien somnolencia o
insomnio. También pueden presentarse
episodios de disnea súbita nocturna
(despertarse bruscamente con sensación
de ahogo) debidos a la denominada
respiración de Cheyne-Stokes durante el sueño.
Las manifestaciones más graves
(y potencialmente letales) del mal
agudo de montaña son el Edema Pulmonar
de Altitud y el Edema Cerebral de Altitud.
Diagnóstico del Mal de Altura. La escala
del Lago Louise
A efectos prácticos (en la montaña,
por encima de los 2500 msnm) la aparición
de cualquiera de los síntomas anteriores
que no puedan explicarse por otras razones
debe considerarse como Mal de Altura y
actuar en consecuencia: dejar de ascender
y, si los síntomas no mejoran, bajar,
perder altitud lo antes posible al menos
hasta la cota donde no se presentaban síntomas.
El diagnóstico del MAM es clínico, esto es,
basado en la apreciación "general" del estado
del sujeto ya que no existe ningún síntoma
que, por sí solo, identifique el MAM de
forma inequívoca. Generalmente se recurre
a tablas de síntomas, cada uno de ellos con
distinta puntuación. Si la suma total de los
puntos obtenidos supera determinado umbral
se considera criterio diagnóstico de MAM,
así como la gravedad del mismo.
De entre todas estas tablas la más utilizada
es la denominada escala del Lago Louise, que
se divide en un cuestionario de autoevaluación
(subjetivo) y una valoración clínica (objetiva).
Tanto en el cuestionario como en la valoración
clínica, el término "grave" normalmente
significa "incapacitante".
Prevención del Mal de Altura. Aclimatación
El estado de forma o la
preparación física, por excelentes
que éstos sean, no previenen el Mal
de Altura en absoluto. Éste puede
producirse a cotas de tan solo
2500 m de altitud y se sabe que
la susceptibilidad al mismo es
inversamente proporcional a la edad
del sujeto, probablemente debido a
la madurez del sistema nervioso.
Tampoco se recomienda el empleo de
fármacos para prevenirlo, sino
adaptarse progresivamente a la
hipoxia de altitud mediante un
proceso denominado aclimatación.
Un esquema típico de aclimatación
puede ser el siguiente:
· Pasar al menos dos noches
entre los 2.500 y los 3.000 msnm.
· Por encima de 2.500 msnm
no sobrepasar 600 m de desnivel
diarios a la hora de acostarse,
aunque durante el día se hayan
alcanzado altitudes superiores.
· Cada 1 km de desnivel se debería
pasar una segunda noche a la misma
altitud que la noche anterior.
· Por encima de 3.500 msnm se debe
subir calmadamente, sin realizar esfuerzos
intensos, sin sobrepasar los 300 o 400 m
de desnivel diarios y descansando un día
por cada dos de subida.
· Por encima de 5 km de altitud no hay
garantía de que una adecuada aclimatación
impida la aparición del Mal de Altura e
incluso edema pulmonar o cerebral,
embolias etc. Para ascensiones a gran
altitud la aclimatación debe ser
prácticamente "personalizada" y depende
en gran medida de la predisposición
del sujeto al MAM.
Es muy importante tener en cuenta que,
a pesar de seguir escrupulosamente un
calendario de aclimatación, el Mal
de Altura puede presentarse en
cualquier momento. Ante cualquiera
de sus síntomas es necesario dejar
de ascender inmediatamente y, si los
síntomas no mejoran, perder altitud
lo antes posible, al menos hasta la
cota donde no se presentaban síntomas.
También es muy importante mantenerse
perfectamente hidratado (beber al
menos 4 o 5 L de líquido diarios) y
una dieta variada rica en hidratos de carbono.
Cuando viajamos a Cusco, Puno, Arequipa
o cualquier otra ciudad de la zona
de la sierra del Perú debemos de
tener en cuenta lo siguiente:
1.- Llegando por avión a zonas de altura:
se debe evitar toda comida pesada y/o abundante,
gaseosas, Coca Cola, café, cigarrillos.
Deberá llevar pastillas de Coramina Glucosada,
las cuales pueden adquirirse sin receta médica
en cualquier farmacia. Colóquese una pastilla
en la boca y sentirá una rápida mejoría
Se debe tomar a diario de 2 a 3 litros de
agua natural y mates de hierbas,
para mantener una hidratación adecuada.
2.- Es preciso mantener una
dieta liviana y altamente energética
rica en carbohidratos, sin grasas, en
pequeñas cantidades y varias veces al
día. Evitar comidas raras a las cuales
el organismo no esté acostumbrado.
3.- Luego de su llegada a la zona de
altura, es preciso descansar y dormir
todo lo que se pueda
4.- Se recomienda tomar un mate
de coca bien caliente y muy concentrado
con unas gotas de limón, si están a
disposición caramelos o toffes de
hoja de coca también seria recomendable comerlos.
5.- Tome siempre una taza
de mate caliente con limón, después
de las comidas; de noche es
aconsejable que sea un mate de manzanilla o anís.
6.- El mate de coca,
así como caramelos, toffes, galletas
y chocolates hecho con hoja de coca
son muy útiles durante el día, evitar
ingerirlos antes de dormir.
Tratamiento
Si a pesar de tomar medidas preventivas
se presenta el soroche, ingiera abundantes
líquidos. El paracetamol es ideal contra
el dolor de cabeza y la coramina limita
las nauseas. La acetazolamida (250 mg 2-
4 veces al día por vía oral, dosis
máxima: 1,000 mg/día) es muy eficaz
para combatir la enfermedad y acelerar la aclimatación.
En todos los casos es preferible
consultar con un médico y observar
las contraindicaciones.
No espere sentirse muy mal para solicitar
oxígeno. Puede encontrarlo en algunos
hoteles, farmacias y en los hospitales.
De hacerlo, solicite oxígeno a un flujo de 2-3 l/min.
Llegando al Cusco
En avión
Es muy importante que camine despacio y
no realice grandes esfuerzos físicos,
recuerde que está a 3,400 m.s.n.m. Lo
ideal es descansar algunas horas después de aterrizar.
Si usted siente que le falta el oxígeno,
puede solicitarlo en el mismo aeropuerto.